CONFESIONES


En la tardes de Pascual, el Señor Jesús se mostró a sus apóstoles y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos». Desde entonces la Iglesia distribuye el perdón de Dios a todos aquellos que se acercan a este sacramento.

De ordinario, antes y durante las Eucaristías habrá un confesor disponible, si no fuese así solicítelo al sacerdote en la sacristía.